El papel de la mujer en el nuevo testamento
Muchos expertos han escrito sobre la importancia de la mujer en la difusión del evangelio. Desde que Cristo resucitó de entre los muertos, las mujeres fueron las primeras en proclamar que el Rey de Reyes y Señor de Señores se había levantado de la tumba con poder y con toda autoridad.
Soy de los que defiende de manera contundente el primordial papel de las mujeres en la proclamación del evangelio. Muchas de ellas incluso, fueron grandes líderes de iglesias y congregaciones.
Durante estudios que he podido impartir, muestro algunos puntos importantes que muestran su gran valor y entrega al evangelio de nuestro Señor Jesucristo.
A continuación te muestro dos puntos importantes sobre ellas:
- Las mujeres fueron las últimas en la cruz, las primeras en el sepulcro y las primeras a las que se les dijo «id y contad».
- El propio Jesús también eligió a una mujer para que fuera la primera predicadora del evangelio. Jesús resucitado le dijo a María: «mas ve a mis hermanos, y diles» (Juan 20:17).
Está claro que en las primeras iglesias domésticas, las mujeres eran las líderes. El hogar era el dominio de las mujeres y el lugar principal de la iglesia primitiva.
Y fue el lugar donde se formó la primera identidad como «familia» y donde se envió el mensaje de liberación de toda opresión.
Los relatos del Nuevo Testamento ilustran claramente el importante papel de las mujeres en el desarrollo de la iglesia en el primer siglo.
Seguramente no es una coincidencia que Pablo, que conoció a Lidia en una reunión junto al río y fue responsable de su conversión, fuera invitado a su casa (Hechos 16:1-15).
¿Por qué Pablo cuestiona el liderazgo de algunas mujeres?
Pero, ¿Qué ocurre con los pasajes de la Primera Carta de Pablo a los Corintios (14:34-36) y de la Primera Carta a Timoteo (2:12), que a menudo se citan para denigrar a las mujeres como líderes y predicadoras de los hombres? Estos textos deben leerse en el contexto del mensaje de toda la Biblia.
Hay que leerlos a través de la historia de Débora, de Gálatas 3:28 «Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús.» y de Priscila, quienes estaban correctamente comprometidas con el evangelio.
Dios ciertamente no llamó a todas las mujeres a posiciones de liderazgo y ministerio (así como no llamó a todos los hombres), pero ciertamente llamó a algunas. La propia Biblia lo confirma.
Son una parte muy importante en la proclamación del evangelio y su asociación está integrada en la historia de la creación. Los hombres y las mujeres cumplen con la contribución de cada uno al Reino.
¿Quién tiene más importancia en el evangelio?
Los hombres y las mujeres son grandes aliados en la realización del Reino de Dios en la tierra. Los hombres y las mujeres se complementan claramente de una manera u otra y son compañeros en todos los sentidos de la palabra.
La Biblia debe leerse en su contexto histórico, sin excepción. Las cartas de Pablo no están atadas a la historia, sino que están arraigadas en ella: lo que sabemos de las mujeres en el siglo I es que tenían pocas oportunidades de liderazgo.
En su mayoría no tenían educación. Tenían poca experiencia en hablar en público o en dirigir congregaciones. Sin embargo, en la iglesia primitiva tenían una libertad que nunca habían experimentado antes, y las instrucciones de Pablo fueron fundamentales para que esto sucediera.
Creó una atmósfera en la que se educaba a las mujeres, se las animaba a hacer preguntas y a liderar. En su carta, menciona a las mujeres colaboradoras en la difusión del evangelio.
Para todos nosotros, las palabras de Jesús significan mucho. Sus mandatos y condenas en la resurrección son neutrales en cuanto al género. Mateo. 28:19 «Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones,».
Hechos 1:8 «y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.»
Mateo 16:24 «Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame.».
Estas asignaciones no tienen un color de personas en especifico, ni especifican una nacionalidad, un nivel social, ni mucho menos un género.
Este mandato de Jesús abarca tanto a hombre como a mujeres. Es por esto que las mujeres tienen las mismas capacidades de administrar las cosas de Dios como los hombres.
Si las mujeres no estuvieran calificadas para este tipo de responsabilidades, entonces no se mencionaran como líderes en el Antiguo Testamento ni en el Nuevo Testamento.
Hoy puedo ver muchas mujeres desempañando grandes responsabilidades, desde pastorear grandes iglesias, sirviendo en instituciones sin fines de lucro.
Incluso, he visto mujeres siendo líderes de naciones en la actualidad. Entonces, si las mujeres fueron grandes líderes en la iglesia primitiva ¿Por qué Dios cambiaría de opinión sobre la capacidad de la mujer hoy en día?
Dios sigue depositando la misma confianza en las mujeres que antes. No te limites por algunas enseñanzas extrañas que se sustentan con una parte de un versículo sin antes investigar el por qué de eso.
Espero haberte bendecido con este artículo y que el Dios Todopoderoso te bendiga a ti y a tu liderazgo. Recuerda que Dios está contigo como estuvo con Josué.
Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas. Josué 1:9
Dios te bendiga!!!
Fuente: Reina Valera 1960